Comienza registrando todos tus ingresos y gastos mensuales. Luego, identifica gastos fijos y variables para ajustar y priorizar según tus objetivos financieros.

Primero, evalúa todas tus deudas y organiza un plan de pago. Prioriza aquellas con mayores intereses y busca asesoría para negociar mejores condiciones si es posible.

Invertir puede ayudarte a hacer crecer tu dinero a largo plazo, pero siempre debe hacerse con conocimiento y asesoría adecuada para minimizar riesgos.